Por David López
Bronca en inglés BEFF) es el nombre de la nueva serie de drama y comedia de humor negro, producida por la prestigiosa productora independiente A24 y recientemente estrenada en Netflix. Consta de 10 capítulos de unos 30 minutos aproximados de duración cada capítulo.
Bronca comienza con un toque de bocina y un casi choque entre vehículos en el estacionamiento de un centro comercial. Una situación que, lamentablemente, se produce demasiado a menudo cuando estamos a los mandos de nuestro automóvil. Este desencadenante deriva en una lucha de egos entre los conductores, Danny (Steven Yeun) y Amy (Ali Wong).
Tras esta premisa se esconde una serie que nos quiere hablar de aspectos más trascendentales del ser humano. Se trata la soledad del individuo, pero no el estar solo físicamente, sin nadie a tu alrededor, sino más bien el sentimiento interior de soledad, de sentir no tener a nadie que te entienda y acompañe de verdad en tu vida.
También trata de la maldad o bondad de las personas y de cómo estos términos, cuando los analizamos en profundidad, y sometemos a los sujetos de pruebas a situaciones que salen de su zona de confort, pueden florecer de forma totalmente natural. Y es que, las personas, como los libros, no pueden ser juzgados por su portada.
Esta serie realmente pretende ser un estudio de la esencia del ser humano. Incide en las situaciones particulares que hacen desencadenar algo que subyace en nuestro interior, despertando nuestras peores conductas, y que nos lleva a tomar decisiones equivocadas. Lo bueno es que no solo se limita a nuestro fantástico dúo protagonista, sino que se extiende al resto de personajes que nos vamos encontrando.
Sin duda, es una serie que va de menos más. Siendo los últimos capítulos totalmente catárticos y emocionales. Sin embargo, me gustaría puntualizar que, en mi opinión, el tramo central de esta primera temporada, se hace un poco anodino y quizá se podría haber solventado en 6 u 8 capítulos, teniendo una experiencia global más placentera.
Uno de los mayores aciertos de la serie son los actores. El tándem Yeun-Wong es sencillamente prodigioso. Una suerte de pareja con una química brutal y con una incesante respuesta inmediata que hace que todo se ponga patas arriba cada vez que comparten una escena. Son la definición del amor-odio. Son tan intensos ambos que, cuando se juntan, es imposible que no implosione el universo entero por los aires en mil pedazos.
Y no solo ellos están espectaculares, el elenco al completo está muy bien seleccionado, dirigido y evolucionado. El personaje del hermano de Danny va creciendo y creciendo durante el transcurso de los episodios, de forma que logra llegar a tener entidad propia. Al igual pasa con el marido de Amy, quien al principio parece algo soso, pero que nos regala unos momentos geniales. Su teoría de por qué según nos hacemos mayores, parece que el tiempo pase más rápido, es sencillamente genial.
La productora A24 sigue sin defraudar. Es la prueba de lo que se puede conseguir cuando se les da los medios y las libertades necesarias a autores de calidad. Sin más, me despido, recomendando sin lugar a dudas esta tremenda Bronca que se cuela en nuestros hogares en esta semana santa.
Fuente: Cinéfilos Frustrados