El Fondo de la ONU para la Infancia (UNICEF) estima que la cifra de niños con desnutrición aguda en Somalia aumentó un 50% desde inicios del año, situándose en 1,4 millones de menores. El riesgo de que estos pequeños fallezcan por enfermedades como el cólera, la diarrea o el sarampión es 9 veces mayor al de un niño sano.
La portavoz de UNICEF, Marixie Mercado, describió la dramática situación a la que se enfrentan: “La combinación de desnutrición, enfermedades y desplazamiento es mortal para los niños. Durante la hambruna de 2011, la diarrea y el sarampión fueron las principales causantes de fallecimientos de menores. Un niño con desnutrición aguda grave y deshidratación puede morir en cuestión de horas si no recibe tratamiento adecuadoâ€, dijo Mercado.
la agencia de la ONU recordó que alrededor de 615.000 personas, la gran mayoría de ellos mujeres y niños, han sido desplazados por la sequía que sufre el país africano desde noviembre de 2016. Esta situación provoca que alrededor de 40.000 niños no vayan a clase.
Por su parte, el portavoz de la Oficina de Coordinación de Asuntos Humanitarios de la ONU (OCHA), Jens Laerke, cifró en casi 3 millones el número de personas en situación de crisis alimentaria en Somalia
Laerke señaló que hasta la fecha se ha recibido el 58% de los 720 millones dólares que el Secretario General de la ONU, Antonio Guterres, solicitó en febrero pasado para ofrecer asistencia humanitaria a los somalíes.
Fuente: Centro de Noticias ONU